El entrenador ha visto la disponibilidad del jugador sene galés ya que, por lo que admitió David Gold, del West Ham, el pasado viernes, Diamé tiene una cláusula de rescisión que podría usarse en enero.
Diamé llegó al West Ham desde el Wigan Athletic como agente libre este verano y desde entonces ha impresionado en el equipo de Sam Allardyce, octavo en la tabla de liga.
Los Hammers quieren atar a Diamé on un nuevo contrato para evitar clubes pagando la actual cláusula de rescisión, pero el interés de grandes clubes podría hacer que el jugador decidiese no cerrar un trato.
No solo el Arsenal va detrás de Diamé: el Newcastle United y el Fulham ya han mostrado interés, y el Liverpool podría hacerlo pronto. De hecho, los de Merseyside estuvieron cerca de ficharle al final de la temporada pasada, pero el interés se disipó con el despido de Kenny Dalglish.